jueves, 26 de febrero de 2015

DICOM , la Imágenen del Presente




Adentrados ya en la década del 2010, presenciamos el posicionamiento definitivo de los sistemas digitales en el área médica, de manera particular en el campo de la Radiología. Consecuentes con este adelanto, utilizaremos de ahora en adelante el término “Imágenes Diagnósticas” para referirnos a todas aquellas prácticas médicas cuyo accionar depende de la obtención de imágenes Digitales. Se incluyen aquí, por tanto, las radiografías, ecografías, RMN, TAC, TEP, endoscopias, angiografías, etc. Pero aquí nos referiremos solo a lo relacionado con la Radiología.

Por fortuna, he podido vivir este rapidísimo cambio de lo completamente análogo a lo digital. Recuerdo aquellos tiempos en los que se revelaban manualmente las películas radiográficas y el posterior advenimiento de las máquinas automáticas que, si bien continuaban utilizando químicos, el proceso se hacía de manera automática. Recuerdo aquellos polvorientos y vetustos archivadores en donde se almacenaban miles de radiografías ocupando grandes espacios en consultorios y hospitales y a los archivistas subiéndose a una escalera para bajar un sobre desde el estante más alto cada que un paciente llegaba a consulta.
 

Sin entrar en detalles, digamos que el formato DICOM es el universalmente adoptado para el tratamiento y manipulación de las imágenes Médicas. Este protocolo permite asociar a las imágenes, valiosa información relacionada con datos clínicos del paciente. 

Adicionalmente, su estructura permite integrarlo a sistemas de gestión hospitalaria H.I.S. R.I.S., 



y a sistemas de archivos (Packs) que permiten el acceso prácticamente desde cualquier lugar del mundo. Al igual que cualquier aplicación, el protocolo DICOM ha sufrido una serie de modificaciones desde su aparición (actualizaciones), que permiten integrar de una forma cada vez mejor y eficaz a los procesos hospitalarios.

VENTAJAS DE LA DIGITALIZACIÓN DE LAS IMÁGENES DIAGNÓSTICAS

Existe un sinnúmero de ventajas con la utilización de las imágenes Diagnósticas Digitales.
Veamos primero algunas ventajas generales:
  • Se pueden integrar a un mismo Sistema (red) varios equipos generadores de Imágenes (ecógrafos, equipos de rayos X convencionales, escanógrafos, resonadores, etc. de un mismo hospital.
    Equipos generadores de Imágenes Conectados a DICOM
  •  Una vez obtenidas las imágenes, estas quedan disponibles para cualquier servicio o persona autorizada (dentro o fuera de la institución)
  •  Estas imágenes pueden ser consultadas simultáneamente por un sinnúmero de usuarios con acceso, desde, literalmente, cualquier lugar físico sobre la tierra. Lo anterior permite que el profesional interesado pueda acceder a estas imágenes desde su casa, desde una finca o playa, hotel solo con que haya acceso a la red (los satélites ahora hacen posible la conexión prácticamente desde cualquier sitio de la tierra).
  • Se pueden sacar un sinnúmero de copias digitales sin deterioro de la calidad original.
Impresión De Imágenes (en deshuso actualmente)
  • Se pueden hacer impresiones en material fotográfico o radiográfico si fuere necesario (aunque la tendencia actual es justamente a la no utilización de estos materiales ya que, no solo encarecen la prestación del servicio, sino que contribuyen con el deterioro del medio ambiente).
  •  A diferencia del sistema análogo, las imágenes digitales pueden ser copiadas en medios digitales como CD´s con fines de archivo personal. Cuando se graban estas imágenes se graba también el programa para poderlas abrir o reproducir, pues no todos los viewer   son compatibles entre sí
Grabación de Imágenes Digitales
  •  Se acaban o, por lo menos se disminuyen notablemente los espacios destinados para el archivo de radiografías
  • Se pueden tener archivadas estas imágenes por tiempos indefinidos sin que estas se deterioren (no como sucedía con las placas físicas)
  •  Existen visores o visualizadores DICOM (viewer) que se pueden montar en Pc´s Smartphones y/o tablets permitiendo una verdadera portabilidad de las imágenes. Por lo general estos son solo visores y, dependiendo de la calidad del mismo, se podrán hacer o no reconstrucciones y otro tipo de maniobras. Lo que no permiten estas aplicaciones, ni siquiera las que se instalan en los equipos en donde se obtienen las imágenes, es la manipulación de metadatos y la información personal asociada a cada pte. como es apenas comprensible, por razones de seguridad.
Aplicaciones para dispositivos fijos y/o móbiles
  •  Por ser un sistema digital, se puede utilizar para teleconferencias, para discusiones grupales, foros, etc. Con grupos o personas ubicadas en diferentes lugares.
Foros y discusiones grupales en línea

  • Por ser imágenes digitales se implementan aplicaciones en los equipos que permiten hacer recortes de imagen (crop) hacer zoom digital, giros y acomodos (ventaneos o variaciones en el centro de la escala de grises y en la cantidad de grises), acciones estas que permiten al tecnólogo presentar imágenes de buena calidad tanto desde el punto de vista estético como de diagnóstico. Lo anterior disminuye  ostensiblemente la cantidad de placas que se repiten por una mala selección de valores.
  •  En el caso de los equipos que permiten reconstrucciones prospectivas de una parte del cuerpo, la información digital obtenida o, lo que algunos llaman “imágenes crudas”,  sirven para hacer numerosos tipos de reconstrucciones en múltiples planos, aún mucho después de haberse realizado el estudio.
  • En los sistemas de visualización directa, podemos darnos cuenta de forma casi inmediata si la radiografía o el estudio quedó bien realizado. Lo anterior nos permite repetir –si es el caso- o llevar a cabo acciones complementarias, como tomar imágenes adicionales.
  •  Existe una ventaja que resulta ser única en el caso de los estudios portátiles y es que, una vez obtenida la imagen y verificada su calidad, esta puede ser enviada de inmediato al packs para que quede a disposición del personal médico interesado. Esto es particularmente útil en aquellos hospitales o clínicas grandes en donde las áreas a las que se le presta servicio portátil (UCI´s, cirugía, hospitalización, endoscopia, angiografía, salas de recuperación, urgencias, etc.)  resultan distantes unas de otras. Con una red WI-FI debidamente dispuesta es posible montar en el sistema las imágenes tan pronto como se obtienen sin necesidad de ir a un puerto específico.






jueves, 19 de febrero de 2015

Radiografía: Formación de la Imágen Radiográfica



Qué tal amigos, bienvenidos a este segundo post sobre “Temas Puntuales sobre Imágenes Diagnósticas”.

Algunos lectores me preguntan si existe una forma fácil de explicar cómo se hace una radiografía.
A continuación trataré de utilizar un ejemplo que, espero, resulte sencillo pero, ante todo, adecuado.

Recordemos primero que en la formación de una radiografía intervienen varios componentes: primero, los rayos X y, segundo, un sistema donde se forma la imagen radiográfica. 

Los rayos X atraviesan el cuerpo
El componente que ayuda a la formación de la imagen consta básicamente de un “chasís” con unas pantallas intensificadoras y de una película radiográfica que se ubica dentro del chasís.
chasís cerrado


Recordemos que la película radiográfica es una placa “fotosensible” hecha de haluros de plata. Recordemos, también, que las pantallas intensificadoras son unas placas luminiscentes que aprisionan por ambos lados a la película radiográfica.
chasís abierto con pantallas intensificadoras


Cuando los rayos X inciden sobre las pantallas intensificadoras que están dentro del chasís, hacen que estas emitan luz (fotoluminiscencia). Esta luz, a su vez, incide sobre la película radiográfica produciendo una alteración en la distribución del material químico de la que está formada. Una vez tomada la radiografía, se lleva el chasís a un cuarto oscuro en donde se extrae la película radiográfica y se somete a un proceso de “REVELADO” con el fin de hacer visibles los cambios que se produjeron cuando la luz incidió sobre ella.

 


LA RADIOGRAFÍA: UNA SOMBRA DEL CUERPO

Cuando exponemos una película radiográfica a los rayos X, estos inciden sobre toda la superficie de la misma. Al revelarla, obtendremos una placa totalmente ennegrecida. 

Se observa tejido blando y el interior del hueso
Pero, qué pasa si colocamos nuestra mano sobre la placa y hacemos una nueva exposición? Aparecerá una imagen blanca con la forma de nuestra mano. 
Dependiendo de la dureza de los rayos X utilizados, se verá más o menos la  estructura de la mano. Cómo podríamos explicar esto? Sencillo. La imagen que se formó (la mano) es una sombra que corresponde a aquellos sitios de la placa en donde los rayos X NO incidieron. En otras palabras, la mano No dejó pasar los rayos X haciendo que las pantallas intensificadoras no emitieran luz y por tanto en estas partes no hubo alteración en la película radiográfica. Por eso decimos, que la imagen formada es una sombra del cuerpo radiografiado. Antagónicamente se trata de una sombra “blanca” y no “negra” como son todas las sombras.
Si los rayos X utilizados fueron de baja energía, solo se verá la forma de la imagen totalmente blanca, pero si se usaron rayos X con una energía adecuada, se verá no solo la silueta de la mano, sino, también, las estructuras que la conforman como el tejido blando, los huesos y las estructuras internas de estos como la trabécula, la médula, etc.  
 
Cuando tomamos una radiografía del tórax estamos interponiendo entre los rayos y la película una estructura con diferentes densidades. Tenemos en el pulmón zonas con aire en donde los rayos X pasarán sin ninguna dificultad y zonas muy densas como los huesos, en donde los rayos tendrán mucha dificultad para pasar. Habrá, también algunas zonas en donde los rayos definitivamente no pasarán. Por tanto una radiografía del tórax mostrará un esqueleto, que es la sombra proyectada en la película, correspondiente a las partes en donde los rayos X no pudieron incidir, y la parte de los pulmones que corresponde a aquellas zonas en donde los rayos no tuvieron ninguna o poca dificultad en llegar hasta la película radiográfica para impresionarla y oscurecerla.

El esqueleto del tórax es una sombra proyectada en la película
 Cuando utilizamos rayos X de mucha energía en una estructura que no requiere tanta, estamos “penetrando” aquellas estructuras que en circunstancias normales producirían sombra en la película radiográfica. Como resultado, en lugar de sombra comenzarán a aparecer zonas oscuras y se perderán los detalles de la estructura que se está radiografiando (sobre-exposición). Por el contrario, cuando se usan rayos X con energía más baja que la que se necesita para cierta parte del cuerpo, todo tiende a quedar blanco.
Resumiendo, una radiografía debe tener una mezcla de sombras (blancas) y de zonas oscuras tal que permita la visualización detallada de la estructura que se está estudiando. A esto es a lo que se le llama un buen "contraste". Una buena radiografía es aquella que nos permite ver desde la parte más blanca hasta la parte más oscura de la parte del cuerpo que se está radiografiando. Al utilizar demasíada o muy poca energía producirá radiografías con bajo contraste que tenderán a quedar o muy negras o muy blancas.

Finalmente digamos que en los sitemas digitales actuales, el concepto sigue siendo el mismo, con la diferencia de que en vez de película radiográfica ahora se usan "detectores" en la adquisición directa o "folios" en la imagen indirecta (el folio cumple con una función análoga a la función de la película radiográfica, pero digitalmente. Por eso el folio no se revela, sino que se procesa o se digitaliza para obtener la imágen radiográfica)

Hasta la próxima..!